Quizás sea una de las más famosas de las teorías filosóficas
chinas y una de las que nos resulten más fáciles comprender. Recordemos que la
Medicina Tradicional China fue incrementando sus bases teóricas a partir de la
inclusión de nuevas corrientes de pensamiento.
Para hacer un repaso, no te olvides de visitar los artículos
anteriores: Teoría de los 5 elementos
Si bien se estipula que el principio de dualidad estaba
presente en las comunidades agrarias de la edad del bronce, la tradición le
atribuye su autoría a Lao Tsé quien define y perfecciona los alcances de la
doctrina.
La Teoría del Yin y Yang establece que en todo objeto o cosa
existente en el universo subyacen dos fuerzas opuestas. Pero estas dos fuerzas
no entran en conflicto, sino más bien todo lo contrario. Se complementan,
coexisten en un equilibrio dinámico. Dentro de una, nace la otra. Y cada una
busca alcanzar el equilibrio.
Se representación más icónica es el Taijitu, que hoy en día
se lo conoce como el símbolo circular que contiene al color blanco y negro. La
línea divisoria es ondulada, aludiendo al equilibrio dinámico y a la constante
transformación.
El Yin se representa con el color negro y alude a la
feminidad; al frío; a lo cubierto y a lo descendente. Y el Yang se asocia con el
color blanco; la masculinidad; el calor y lo ascendente, entre otras cosas.
Tengamos muy presente que estas son doctrinas filosóficas,
fruto de la observación y convivencia con la naturaleza. De hecho,
etimológicamente, Yin, significa “ladera de la montaña que da a la sombra” y
Yang “ladera de la montaña que da al sol”.
Estas dos fuerzas mediante sus relaciones establecen ciertas
características.
Son relativas;
cualquier fenómeno es relativo a su punto de referencia y éste a su vez se transforma en su opuesto. Si
señalamos arriba es porque existe el abajo.
Son interdependientes,
por lo tanto una no puede vivir sin la otra. Se necesitan mutuamente, ya que no
pueden vivir aislados.
Son crecientes y
decrecientes; el yin avanza sobre el yang, como la noche sobre el día. Siguen
una dirección y un ciclo constante. El yin se convierte en Yang y viceversa.
Son intertransformables;
refiere a la transformación cualitativa de algo, cuando se alcanza un punto
límite se produce un cambio en la dirección opuesta.
Recordemos que esta teoría comenzó como una doctrina
filosófica. La medicina tradicional china asimiló los principios adaptándolos
al cuerpo humano. Así, por ejemplo, las actividades funcionales son
consideradas Yang, así como también la sección dorsal y parte superior del cuerpo
humano; y como Yin a las sustancias nutritivas; a la región inferior y la zona
pectoral.
También se han asignado cualidades Yin y Yang a los órganos
y funciones del cuerpo humano, pero eso lo trataremos en profundidad en el
siguiente articulo:
Teoría de los
órganos Zang-Fu
No te lo pierdas!!